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Abogados españoles en la defensa de los familiares de los policías asesinados en Gdein Izik

16/01/2017 13:50 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

El despacho español de abogados Peñas Roldán y Asociados participará en el nuevo juicio por los disturbios en Gedin Izik (Layounne-Marruecos) donde fueron asesinados 11 agentes de las fuerzas del orden y un miembro de Protección Civil

El despacho de abogados españoles, Peñas Roldán y Asociados actuará en defensa de las familias de los trece asesinados durante los disturbios de Gdein Izik -que se produjeron hace seis años- en el juicio que se celebrará a partir del próximo día 23 de Enero, en la Corte Penal de Rabat. El juicio que hace tres años se celebró en la Corte Militar fue recurrido y el Tribunal de Casación ordenó que se celebrara de nuevo el Proceso por un Tribunal Civil en aplicación de las reformas procedimentales que han operado en el Reino de Marruecos tras la reforma constitucional de 2011. Días atrás se celebró la vista preliminar y una vez más se pudo observar como los asesores jurídicos pro-polisarios, lejos de defender a los acusados, dirigieron su acción a la reivindicación política.

Lo empírico del caso, lo objetivo de todo lo ocurrido, es que en aquellos disturbios del campamento de protesta, como consecuencia de la acción de unos individuos que desplegaron las técnicas propias de las guerrillas, murieron treces personas, once de ellos agentes de las fuerzas del orden, que iban desarmados, y un miembro de la Protección Civil.

Quienes sí retienen en su memoria todo lo que ocurrió en Gdein Izik, y en estos días con especial intensidad, son las familias de las víctimas; las madres, los padres, los hermanos, las viudas, los hijos, sus amigos, sus compañeros de trabajo, en definitiva, todos aquellos que -de una forma u otra- vieron como saltaba por los aires su vida, los que vieron con sus propios ojos como a sus seres queridos les arrebataban la existencia lapidados, apaleados e incluso degollados. Los que vieron con sus propios ojos como los asesinos y sus secuaces no se conformaron con el asesinato sino que, después, profanaron los cadáveres orinando sobre éstos, exhibiendo una conducta abyecta que queda fuera de cualquier límite de la protesta callejera.

¿Podemos imaginar qué habría ocurrido si en España, por poner un ejemplo, durante una manifestación de protesta, determinados individuos de esa masa humana, perfectamente organizados hubieran asesinado de esa manera a once policías y un miembro del SAMUR?

La investigación policial sobre aquellos hechos puso al descubierto una presunta trama criminal que, parcialmente, habría sido ideada en Argelia, según han reconocido alguno de los acusados. Tras organizar un campamento de protesta, determinados individuos -las autoridades acusan a 21 hombres- se hicieron con el control del campamento donde se produjeron negociaciones entre los acampados y las autoridades marroquíes que apuntaban a una solución pacífica, negociaciones que se interrumpieron bruscamente por quienes -como consecuencia de la trama organizada y pagada en Argelia, indica la acusación- decidieron que se plantearan demandas imposibles y el enfrentamiento violento, incluso causando la muerte de los miembros de las fuerzas del orden.

Estos activistas habrían estado liderados por, de entre los acusados -siempre según la acusación pública- Enaama Asfari, con la destacada colaboración de otros de los 23 acusados en el juicio.

Mientras en las negociaciones entre las autoridades marroquíes y los responsables vecinales que protestaban en el campamento se llegó a un punto de equilibrio tal que, incluso se llegó al acuerdo de desmantelar el campamento; el activismo presuntamente de los acusados y de elementos foráneos, organizaron una respuesta violenta bajo el juramento de enfrentarse contra las fuerzas del orden en caso de que llegaran a actuar. Hubo un reparto de 'roles' para dirigir las acciones violentas, reparto de armas blancas, encargo de tareas en cuanto a la utilización de bombonas de gas incendiarias o explosivas y cocteles molotov.

La intensificación de los mensajes orientados incluso 'a causar el mayor número de muertes entre los militares' determinó la actuación de las autoridades marroquíes.

La víspera hubo reuniones de quienes se habían autoconstituido en 'policía y milicianos del campamento', según las investigaciones realizadas -seguramente incluso con infiltración en el área-.

La mañana el 10 de octubre se inició el desmantelamiento por parte de las fuerzas del orden. Previamente desde helicópteros con altavoces se solicitó a la gente que lo abandonara, se instalaron autobuses para que la gente volviera a El Aaiun, la mayoría de la gente -temerosa incluso por las consignas violentas que se habían producido horas antes dentro del campamento- decidieron salir de allí.

Las familias de los policías y el miembro de Protección Civil asesinados podrán actuar en el Juicio en defensa de sus demandas, el abogado español actúa junto a letrados marroquíes y europeos

Unos aprovecharon los transportes públicos, otros lo hicieron en sus propios vehículos. Finalmente quedaron allí un grupo de violentos que actuaron con un desprecio absoluto, respecto de cualquier autoridad ni orden o petición que la misma hiciera. Comenzaron los ataques con piedras, lanzamientos de bombonas de gas incendiadas.

Los asesinatos quedaron grabados en vídeo, incluso por parte de alguno de los acusados, según las declaraciones de los detenidos, atropellaron a los agentes del orden con vehículos 4x4, los lapidaron en otros casos, los degollaron, orinaron en los cadáveres. Este comportamiento, propio de los más salvajes grupos jihadistas takfiris, se produjo además bajo precio, según las investigaciones, ya que a los detenidos se les intervino una cierta cantidad de divisas argelinas y dólares.

Los agentes de las fuerzas del orden que actuaron eran en su mayor parte muy jóvenes y no portaban armas de fuego ya que el cometido era desmontar las jaimas en el campamento, una zona de gran superficie. El despliegue táctico fue mejorable pues, mientras que unos grupos de miembros de las fuerzas del orden comenzaban a desmontar las jaimas; otro se desplegaba por el lugar. Un pequeño grupo fue rodeado y atacado de forma brutal, fueron apaleados y abatidos, heridos de gravedad, de las víctimas, algunos...las imágenes muestran un ensañamiento absolutamente extraordinario. Tal grado de violencia empleaban algunos individuos que hasta hubo mujeres que trataron de impedirlo, sin conseguir su objetivo. Las pedradas y golpes contra los cuerpos heridos de los militares se prolongaron durante minutos. TODO QUEDÓ GRABADO.

Las fuerzas del orden pudieron registrar jaimas en las que se centraba la actividad de algunos de los acusados. Dentro de ellas se incautaron de miles de dólares americanos y una cantidad, aun mayor, de Dinar de Argelia. Las fuentes de inteligencia ponen de manifiesto que hubo 'pagos en metálico' desde procedencia 'extranjera' a los activistas más violentos.

Lo cierto es que, tal como se ha señalado, semanas antes del campamento de Gdeim Izik se produjeron en Argel (Argelia) dos conferencias. Una oficial, y con participación de partidos políticos españoles, y otra paralela en la que se acordaron medidas de presión y activismo en territorio marroquí; en estas cumbres participaron algunos activistas que luego se incorporaron al campamento de Gdeim Izik. Por cierto, que antes de este campamento intentaron levantar otros dos que fracasaron, uno de ellos en la ciudad marroquí de Smara, al Sur del denominado 'Sáhara Occidental'.

Entre los elementos más agresivos pudieron verse uniformes milicianos similares a los empleados por el Frente Polisario.

Paralelamente, con especial intensidad, elementos colaboradores del Frente Polisario, desde el propio campamento y El Aaiun distribuyeron fotos falsas de supuestas víctimas incluyendo la imagen de niños -heridos y muertos- que imputaban a acciones de los militares marroquíes; finalmente quedó demostrado que en realidad esas imágenes se correspondían con las víctimas de un ataque de Israel sobre Palestina, muchos meses antes. Igualmente lanzaron a los medios de comunicación españoles una foto con una familia completa asesinada; dijeron que habían sido asesinados en el interior de su vivienda por los militares de Marruecos en El Aaiun, a las pocas horas, tanto por las fotos de los niños como las de esta familia (familia Rachidi de Casablanca). La mentira, aunque la diga un periodista, suele tener las 'patas cortas' pues los parientes de la familia Rachidi pudieron demostrar sus daños morales por la falsa información ante los tribunales europeos. En realidad los Rachidi fueron asesinados por un familiar enajenado en Casablanca, a dos mil kilómetros de El Aaium, meses antes.

La relación de delitos que se plantean por la acusaciónson: a) Pertenencia a banda armada b) Utilización de la violencia contra los representantes de la fuerza pública en el ejercicio de sus funciones. c) Ocasionar la muerte por empleo de la violencia de agentes marroquíes, que se imputa a 12 de los acusados. d) Profanación de un cadáver respecto a 2 de los acusados. e) Atentar contra la seguridad interior de Marruecos.

Tras el juicio militar, con sentencias que iban desde varias cadenas perpetuas a unos pocos años, se produjo un recurso y la Corte de Apelación ordenó que el juicio debía celebrarse de nuevo en un tribunal de naturaleza civil. De ahí que el próximo día 23 comenzará de nuevo el proceso, la principal diferencia respecto del anterior, además de que no serán jueces militares, es que los familiares de los asesinados van a poder actuar en las sesiones en defensa de su acción civil. Un grupo de abogados marroquíes dirigirán el trabajo conjunto en el que participan también abogados de España, Francia, Bélgica entre otros países. El abogado español que actuará en defensa de las familias de los asesinados será Lorenzo Manuel Peñas Roldán, desde despacho Peñas Roldán y Asociados.

Las familias de las víctimas por fin tendrán voz en este macrojuicio en el que lo único objetivo, ahora mismo, es que aquellos policías y aquel miembro de Protección Civil murieron apaleados, lapidados y degollados. Ahora se les tiene que hacer justicia.

La Corte de Apelación ordenó repetir el juicio contra los acusados de los trece asesinatos que se cometieron durante el desmantelamiento del campamento de Gdein Izik


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Chema Gil (195 noticias)
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