El grupo petrolero español Repsol anunció este jueves unos beneficios netos de 1.612 millones de euros en 2014, un monto unas ocho veces superior al del año anterior, cuando se vio duramente afectado por la expropiación de su filial argentina YPF.

Los analistas interrogados por el proveedor de informaciones financieras Factset esperaban un promedio de 1.800 millones de euros. En el cuarto trimestre de 2014, el beneficio neto fue de 319 millones de euros, contra una pérdida de 1.090 millones en el mismo período un año antes.

Repsol indicó que había sufrido la caída de los precios del petróleo, que disminuyó en 606 millones de euros los beneficios. Ese factor negativo fue compensado por el comienzo de la explotación de los pozos de hidrocarburos de Perú y Brasil y por el "excelente resultado" de las actividades de refinado y ventas de petróleo ('downstream').

La producción promedio aumentó 2, 5% en 2014, estableciéndose en 354.000 barriles por día.

A fines de 2014, la deuda neta de Repsol era de 1.940 millones de euros, un nivel históricamente bajo, dijo un comunicado de la empresa.