Las autoridades de Costa Rica han decidido este año el despido de 115 integrantes de diferentes cuerpos de seguridad por haber participado en delitos graves como homicidios, violaciones, asaltos y secuestros, informó el jueves el ministro de Seguridad, Gustavo Mata.

El 90% de los casos se dieron en la Fuerza Pública, el principal cuerpo de policía del país, dependiente del ministerio de Seguridad, explicó Mata en conferencia de prensa, junto a los jefes de los principales cuerpos de policía.

"Este uniforme no se puede manchar, por eso no vamos a permitir que se generen actos de corrupción", afirmó el ministro.

Una lista de cesados, divulgada por el Ministerio de Seguridad incluye a ocho denunciados por abusos sexuales contra menores de edad y ocho por presunta participación en homicidios.

Otros nueve están acusados por asaltar viviendas y negocios, utilizando para ello uniformes, armas y vehículos oficiales.

El funcionario explicó que 51 agentes ya fueron removidos de sus puestos, 31 están en proceso de notificación y otros 33 serán notificados en los próximos días.

Mata dijo que se está analizando dónde se encuentra la falla, si en los mecanismos de reclutamiento o en las pruebas psicológicas. "No podemos dormirnos, tenemos que ser contundentes" frente a las irregularidades en los cuerpos policiales, indicó

El ministro no descartó que haya penetración del crimen organizado, no solo en la policía, sino en otras estructuras del Estado, "como hemos visto en países como Guatemala o Honduras".

Costa Rica, que proscribió el ejército desde 1948, cuenta con una fuerza policial de carácter civil integrada por unos 14.000 efectivos, encargada de las funciones de seguridad interna y de protección de las fronteras.