Los avances y la investigación en el desarrollo de biomateriales compatibles con el hueso humano, como la hidroxiapatita, han permitido la utilización de implantes dentales para sustituir dientes o muelas perdidas debido diferentes causas como la caries, la enfermedad periodontal o accidentes. El implante dental es un tratamiento que hoy en día se realiza de forma habitual en la consulta del dentista, pero su éxito a largo plazo dependen fundamentalmente de los cuidados y la higiene oral que el paciente portador realice de forma habitual. 

El doctor Humberto Arias, de Clínica Dr. Arias,  nos da las claves sobre cuáles son estos cuidados si queremos mantener nuestros implantes dentales en buen estado. 

- Realizar una higiene oral habitual y periódica. Mantener una boca limpia para evitar la proliferación de bacterias y la acumulación de sarro es imprescindible para cuidar el implante dental. En este sentido, realizar un cepillado tres veces al día después de cada comida es básico para conseguir este objetivo.

- Usar la seda dental. El cepillo de dientes no es suficiente. La seda dental es un gran aliado para la higiene del implante dental, ya que permite acceder a la base del mismo y a la zona interproximal, es decir, al área entre la corona del implante y los dientes contiguos, donde no llega el cepillo de dientes. El Dr. Arias recomienda utilizar la seda dental al menos una vez al día, y nunca olvidarnos de ella en el último cepillado, antes de acostarse. 

La higiene dental del implante dental debe realizarse de forma exhaustiva utilizando seda dental, cepillos interproximales o irrigadores bucales

- Cepillos interproximales. Es otra herramienta muy útil para la higiene del implante dental. Se trata de pequeños cepillos muy finos (existen de varios grosores) con los que se consigue limpiar el área entre la corona del implante y el diente más próximo.

- Irrigadores bucales. Se trata de un pequeño aparato de limpieza dental, similar a un cepillo de dientes eléctrico, que lanza un fino chorro de agua a presión con el que se arrastra la suciedad de las zonas interdentales. 

- Revisión con el dentista. Es fundamental que la persona que lleva implantes dentales visite a su dentista al menos una vez al año. De este forma el profesional podrá comprobar medienta una radiografía el estado del implante dental y descartar la presencia de problema como la perimplantitis que se manifiesta en forma de inflamación de los tejidos blandos que rodean al implante debido a la acumulación de bacterias y que pueda provocar la desaparición del tejido óseo en el que se soporta el implante dental. 

Las revisiones con el odontólogo para comprobar la evolución del implante dental son básicas para conocer su estado