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Santo Domingo.- El presidente electo Danilo Medina y el alcalde Juan de los Santos, además de muy sólidos amigos, ahora son compadres para que no quepa ninguna duda de hasta dónde llega su amistad.Es como en aquellos tiempos de la Edad Media, cuando los reinos establecían alianzas mediante el matrimonio de dos de los suyos.
Ayer, día domingo, Medina salió de su enclaustramiento, para exponerse ante un selecto grupo de relacionados. Nada de convocatoria de periodistas, nada de declaraciones de interés periodístico a quienes llegaron hasta el lugar.Medina llegó al Hotel El Embajador a "encompadrar" con Juancito y su esposa, la bellísima Berlinesa, que ayer estaba guapísima.La madrina era la hermana de Juancito, Ana María, bella y elegante, como siempre.Al pequeño Juan Carlos lo bautizaron en una pequeña capilla dentro del hotel.Juan Manuel, el otro hijo de la Juancito y Berlinesa, estaba intranquilo. Siempre es así.Danilo y Ana María, sentados a la derecha, visto desde el frente. Juancito, Berlinesa, Juan Manuel y Juan Carlos, a la izquierda.
En dos hileras de sillas, en el frente, estaba aquel puñado de invitados especiales. Muy reducido, por cierto.Ninguno soltó prenda antes de que llegara la hora. Ninguno le dijo a sus relacionados que iban al bautizo de un hijo de Juancito y Berlinesa y que el padrino sería nada más y nada menos que el Presidente electo, Danilo Medina.Si la voz se hubiera corrido, es casi seguro que habría llegado una muchedumbre, papelitos en manos, a solicitar empleos o favores.De Santo Domingo Este eran muy escasos los asistentes. Se podían contar con los dedos de las dos manos y sobraban dedos.
Por ejemplo, entre estos estaban Jangle Vásquez, propietario de Credigás y la gasolina nativa, entre múltiples empresas; el también empresario del área de los combustibles Domingo Barett y su esposa; el próspero empresario Luis Alberto Tejeda, y su esposa, y Luis Henríquez, también con su esposa.Además Richard de los Santos, hermano de Juancito; Omar Fernández, uno de los principales ejecutivos de Juancito Sport; los senadores Julio César Valentín, Tomy Galán y Cristina Lizardo; el Ministro de Obras Públicas Victor Díaz Rúa; el contralor General de la República, Simón Lizardo, los periodistas Julio Martínez Pozo, Euri Cabral, Hector Herrera Cabral, Luisín Jiménez.Además, Esther Wong, quien es Directora de Recursos Humanos del ASDE; Mildred Charlot, Directora de Relaciones Públicas del Ayuntamiento;También estaba presente el empresario Domingo Santiago empresario de Santo Domingo Este, y aliado del ASDE.unto a ellos había un puñado de personas a las que no reconocí, pero que, era evidente que eran del entorno cercano de Juancito y su esposa.Todos querían estar cerca del presidente Medina.Parecían querer que Medina les confirmara, aunque sea con un saludo afectuoso, que todos son "de los míos".Luis Henríquez y Medina se fundieron en un abrazo breve y fuerte y profundo que pareció que cada uno, ciertamente, se decían que son "de los míos".Se abrazaron como si fueran dos viejos amigos que han compartido alegrías y tristezas.Quizás ese abrazo tiene algún mensaje que no he podido descifrar.Ahora bien, lo que sí queda claro es que el círculo más estrecho estaba conformado por Medina, Valentín, Galán, Cristina y Simón Lizardo, Díaz Rúa y Juancito. Todos se sentaron en la misma mesa y hablaron ampliamente. Díaz Rúa parecía el más locuáz. Juancito y Simón, los más discretos.El bufette lo encabezaron Juancito y Berlinsea. Le siguieron, Danilo y su esposa Cándida, ella, siempre discreta. Le siguieron los demás. JUAN DE LOS SANTOS Y DANILOMedina dio la vuelta al amplio bufette, con lo mejor de lo mejor.En cada tipo de alimento, si no lo conocía, le preguntaba a quien le servía:-"¿Qué es esto?".Si le agradaba, accedía a que le sirvieran. No se sirvió mucho. Como Juancito, que tampoco se sirvió mucho.En el caso del alcalde, imagino que quedó con hambre porque se le reconoce por su enorme apetito. Además, no había el pollo horneado que a él le gusta. Se come uno entero él solo.Al pasar por el bufette, uno de los empleados del Hotel no se aguantó las ganas y le pidió al presidente Medina que le permitiera tomarse una foto con él, y Medina aceptó sonriente.Entonces, el empleado sacó velóz su teléfono celular, abrazó al presidente y estiró su mano derecha con el teléfono-cámara en la mano.-"Click".
FRANCIS GAZ AMIGO DE JUAN DE LOS SANTOSEl hombre estaba feliz.Otros que estaban felices eran el puñado de invitados. Se sienten cerca del poder.Pero quien se le veía más complacido era a Juancito.Este compadrazgo confirma su cercanía con Medina, y él lo sabe.