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El desayuno escolar (distractor o certeza de un sabotaje)

31/10/2010 01:30 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

Instituciones del sector agropecuario dominicano dicen que la falta de controles de calidad certificados e ineficiencia en su estructura de servicios son las reales causas de las intoxicaciones y el deterioro de la calidad del desayuno escolar

Instituciones del sector agropecuario dominicano dicen que la falta de controles de calidad certificados e ineficiencia en su estructura de servicios son las reales causas de las intoxicaciones y el deterioro de la calidad del desayuno escolar.

Los dirigentes del sector ganadero nacional afirman que las recientes intoxicaciones de alumnos son lógicas consecuencias de la falta de higiene en los ámbitos de servicio y de entrenamiento de las personas encargadas de manejar los alimentos y no dejan de tener razón.

Alegando, además, que es irracional “presumir que el desayuno escolar pudiera ser saboteado selectivamente por embozados agentes del sector ganadero, “cuando nuestras demandas al respecto han sido planteadas a lo público, siempre con argumentos válidos y con total transparencia ante los órganos del Estado y la opinión pública”.

Esta lógica reflexión de los sectores ganaderos del país, entre otras cosas, de entre las cuales me permito señalar el hecho de que no es entendible, comprensible ni digerible que un presidente informado acerca de un supuesto sabotaje en la producción, distribución y entrega del desayuno o merienda escolar no establezca responsabilidades, ni mucho menos acuda a someter a la justicia a los protagonista de tan criminal hecho, me lleva a suponer que posiblemente el exagerado abordaje del tema de las intoxicaciones no es más que un maquiavélico y ruin distractor que está provocando tal nerviosismo en la población estudiantil, al grado de llevarlos a creer que están intoxicados, cuando lo cierto es que pudiera ser todo aquello producto de una neurosis colectiva.

No se puede descartar el hecho de que son pocos los centros educativos que poseen una cocina habilitada para preparar alimentos, como también son muy pocas aquellas que poseen los medios adecuados para refrigerar y/o almacenar el único alimento que a veces reciben nuestros estudiantes pobres.

¡Basta ya de demagogias y discursitos baratos! ¡Gobernemos para los pobres aunque sea un año! ¡Despertemos, carajo!

Pienso, y es mi parecer, que el problema d las intoxicaciones e indigestiones es fácil de de solucionar y que no hay que cacarear tanto los huevos; es simplemente asunto de poner en ejecución real las nuevas propuestas educativas; por ejemplo, si estuviera en mi poder:

Propusiera como un proyecto de aula LA PRODUCCIÓN SECTORIAL O LOCAL DE LA MERIENDA ESCOLAR, como una forma de involucrar a los/las estudiantes a la búsqueda de una solución a sus propios problemas, dando a la vez participación a las sociedades padres y amigos, con lo cual se lograría la dinamización del proceso de enseñanza aprendizaje y la adecuada distribución de los 17, 18 o 19 millones que supuestamente se invierten en la producción de la merienda para evitar el protagonismo del monopolio empresarial y acabar con el conflicto que mantiene enfrentados a empresarios, ganaderos y gobierno y que hace surgir las apetencias de los oportunistas que luego se visten de defensores del estudiantado y el magisterio nacional, cuando en realidad lo que buscan es seguir utilizándonos como siempre lo han hecho.

Recuerdo bien los desayunos de mi infancia, la época que era servido en las escuelas un manjar suculentísimo, el cual también era distribuido a los pobres de los sectores marginados y que consistía en: unas veces arepitas de maíz con una leche a la que llamábamos Bambi y otras veces platos de trigo con no recuerdo que, pero que nunca nos intoxicó, ni nos mató, ni nos desnutrió, sino que nos mataba el hambre. ¡Hambre! Esa es la cuestión: matar el hambre sin la finura de los grados de nutriente. Solo demos de comer al futuro de la patria.

No es tan difícil hacer eso, es solo cuestión de voluntad. Con poca inversión, podríamos hasta desparasitar y vitaminar a nuestros estudiantes y en prevención hasta vacunarlos contra las epidemias de época; sin embargo, nada de esto es posible con tan poco presupuesto para la educación y con tan mal trato a los educadores y educadoras.

¡Basta ya de demagogias y discursitos baratos! ¡Gobernemos para los pobres aunque sea un año! ¡Despertemos, carajo!


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Tonyarc (51 noticias)
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