¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Eldiario.es escriba una noticia?
La dimisión del ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, se produce tras la dimisión el pasado domingo del ministro para el Brexit, David Davis, por sus diferencias con la primera ministra, Theresa May, en la postura negociadora de Reino Unido frente a Bruselas.
El viernes se celebró una reunión a puerta cerrada con todos los ministros en la que Theresa May trató de resolver las divisiones internas en su gabinete sobre la posición británica. En la reunión se acordó proponer a la UE un área de libre comercio con una equivalencia regulatoria con el bloque comunitario para bienes, aunque no para servicios. Desde entones, se han producido tres dimisiones de alto nivel: la del ministro del Brexit, David Davis; la del ministro de Exteriores, Boris Johnson; y la del viceministro del Brexit, Steve Baker.
Tras la cumbre del viernes en Chequers salió a la luz que Johnson se refirió a los intentos de vender el plan del Brexit de la primera ministra como 'dar brillo a un trozo de mierda'.
"Esta tarde, la primera ministra ha aceptado la dimisión del Boris Johnson como ministro de Exteriores. Su sustituto será anunciado pronto. La primera ministra agradece a Johnson su trabajo", ha afirmado un portavoz del Gobierno.
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, ha sido uno de los primeros en reaccionar. "Los políticos vienen y van, pero los problemas que han creado a la gente continúan. Solo lamento que la idea del #Brexit no se haya ido con Davis y Johnson. Pero... ¿quién sabe?.
Politicians come and go but the problems they have created for people remain. I can only regret that the idea of #Brexit has not left with Davis and Johnson. But...who knows?
? Donald Tusk (@eucopresident) 9 de julio de 2018En la carta de dimisión de Davis, el exministro critica la propuesta de May para un espacio de libre comercio entre Reino Unido y la Unión Europea gobernado por unas normas comunes: "[La propuesta] entrega el control de buena parte de nuestra economía a la Unión Europea y en ningún caso devuelve el control de nuestras leyes".