¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Internacionales escriba una noticia?
Unos mil campesinos sin tierras de Paraguay, autodenominados “carperos”, intentaron hoy ocupar armados de palos y machetes un local de la Fiscalía en la localidad de Iruña, distante unos 500 kilómetros al noreste de Asunción. Los labriegos, que forman parte de un grupo de ocupantes ilegales de tierras en el departamento (provincia) Alto Paraná, amenazaron con hacerse cargo de la sede del Ministerio Público para exigir una respuesta a sus demandas. Unos 200 efectivos de la Policía Nacional se hicieron presentes en el lugar a pedido de las autoridades judiciales para resguardar el edificio, impedir el vandalismo y mantener a unos 50 metros de distancia a los manifestantes. La mayoría de los agentes policiales pertenecen al Grupo Especial de Operaciones (GEO) y tienen como misión impedir la ocupación de la sede fiscal. Según los reportes emanados de la zona, los sintierras llegaron a Iruña provenientes de la localidad de Ñacunday, donde amenazaron con masivas invasiones a extensos sojales. Los manifestantes, encabezados por el dirigente Federico Ayala, están a la espera del arribo de un contingente mayor de campesinos para intentar rebasar el cerco policial y ocupar la sede de la Fiscalía en Iruña. Los sintierras mantienen desde hace más de tres meses en vilo a los productores agropecuarios del Alto Paraná, muchos de ellos brasileños o de doble nacionalidad (paraguayo-brasileña), a quienes acusan de ocupar en forma ilegal inmensas superficies de tierras.