PSOE, Podemos y PNV, intentarán ampliar el acuerdo a otras fuerzas políticas para sacar adelante el nombramiento del Consejo de Administración del ente público.

ERC y PDeCat no ofrecen ninguna alternativa a éste, pero, sin embargo, por el momento, no se adhieren al consenso. Compromís, Foro Asturias, UPN, Coalición Canaria y Nueva Canarias no apoyaron la lista y no parece que vayan a sumarse a ninguna alianza. No obstante el Gobierno deberá negociar con todos ellos si quiere conseguir los 26 votos necesarios para lograr el acuerdo final en el Congreso.

Por su parte el PP, también presentó su propia lista de candidatos, en su línea conservadora y continuista, donde sigue estando el actual director de TVE, Eladio Jareño. Obtuvieron 128 votos favorables, 22 menos que PSOE, Podemos y PNV.

El compromiso es acabar de una vez con la utilización de los medios públicos para hacer propaganda política. Pero esto parece que los Populares no lo aceptan, porque para ellos es la herramienta perfecta que propaga el miedo y las mentiras manipulativas que vierten sobre la ciudadanía en detrimento de sus contrarios en la escena política.

El compromiso es acabar de una vez con la utilización de los medios públicos para hacer propaganda política

La falsedad, las patrañas y los embustes a este fin encauzados, así legitimizados, se organizan y difunden con la única pretensión de sindicar al pueblo en torno a una idea imbuida y artera que reste al oponente y les sume a ellos; esta es la concepción de público que el Partido Popular tiene. De ahí, que ahora busquen, sin escrúpulo alguno, envenenar la transparencia que sólo la izquierda progresista puede y quiere instaurar, utilizando para ello sandeces torpes típicas de mentalidades hipócritas y artificiosas como que Monedero presentará Informe Semanal o que el telediario será La Tuerca de Pablo Iglesias; cuando saben sobradamente que la verdad y la imparcialidad es precisamente la garantía que se pretende fomentar.

Visto lo visto estos últimos años, ¿podría considerarse Televisión Española, en manos de la derecha, señal de garantía en información objetiva, conforme a su función principal? Desde luego que no, en su periplo conservador ha ejercido siempre, sin ningún pudor, un derecho autoimpuesto de desinformación y propaganda.

El fin del ente público hoy, debe ser el de dar a los españoles una información veraz, fiel, equilibrada, clara, y al mismo tiempo, con independencia, de modo que esa información sea aplicable, en la misma medida, para todos.

Sólo el que no quiere transparencia se resiste al cambio; o se conforma con lo que hay para justificarse.