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La pasión es una emoción poderosa, intensa de cualquier tipo. Nos lleva a la acción, puede definir nuestra vida, exaltar o destrozarla
La devastación de la pasión
La pasión es una emoción poderosa, intensa de cualquier tipo. Nos lleva a la acción, puede definir nuestra vida, exaltar o destrozarla.
Cuando exaltamos al máximo por una emoción, vamos más allá de nuestros límites habituales para experimentar, crear y destruir, es como la pasión, por su naturaleza, busca la expresión.
Nos despierta a las cinco de la mañana bajo la lluvia torrencial, a pesar de las pocas las probabilidades de hacer una audición para tener la oportunidad de trabajar como artista. Nos dice que la medianoche es un excelente momento para juguetear con un invento, aunque nuestro "día de trabajo" comienza a las ocho de la mañana.
Nuestro deseo de una experiencia fuera y por encima de lo ordinario nos puede llevar a grandes cosas. Sed de saber, de explorar hasta hacer llegar a la gente a la luna. Nos lleva, para bien o para mal, más allá de nuestro día a día, incluso cuando necesitamos romper las reglas.
La ruptura de las reglas de Inglaterra trajo a Estados Unidos a la existencia.
La pasión también rompe nuestros corazones. Un acto de infidelidad destruye al traicionado, lo deja preguntándose si el amor fue alguna vez real, dudando de su propia capacidad de saber. El tramposo también está dañado, no importa cuán suaves sean las justificaciones. "El impulso del momento puede convertirse en el dolor de toda una vida", L. Ronald Hubbard.
La pasión por ayudar a los socorristas a trabajar durante veinte horas al día durante varias semanas solo tras la esperanza de que si existe la posibilidad de que se pueda salvar una vida más. Es lo que nos mueve a caminar a través del fuego para salvar a otro ser vivo.
Dependemos de individuos creativos apasionados para protegernos y hacer avanzar nuestra cultura.
¡Les doy las gracias!