Globedia.com

×
×

Error de autenticación

Ha habido un problema a la hora de conectarse a la red social. Por favor intentalo de nuevo

Si el problema persiste, nos lo puedes decir AQUÍ

×
cross

Suscribete para recibir las noticias más relevantes

×
Recibir alertas

¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Mario Holguin Alvarez escriba una noticia?

Legados del Partido de la Liberación Dominicana

29/05/2011 19:00 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

Reconocimiento a las obras del Partido de la Liberacion Dominicana en el devenir del tiempo

Otra Carta Abierta a los Peledeístas.

Legados del Partido de la Liberación Dominicana.

Mario Holguín

Rep. Dominicana

Mayo 27, 2011.

Todas las cosas que se dejan como herancia, sean materiales o no, producto del accionar de una persona o grupo, conforman el concepto de legado.

En ese orden Don Juan Bosch tuvo múltiples facetas a lo largo de su vida. Prolífero autor de obras literarias que lo convierten en inmortal de la literatura narrativa a nivel mundial; pero además, como político no se le discute su imponente figura e ideales en la creación y fortalecimiento del sistema democrático en la República Dominicana.

Líder, orientador y guía por demás, de las dos principales y más grandes fuerzas políticas en el siglo pasado y que aun después de varias décadas de incidencia sobre la población persisten como tal, sin antecedentes en nuestro país.

En la actualidad, son estos dos los partidos antagónicos entre sí con mayor arraigo en la sociedad dominicana. El primero, cuyo cambio en el proceder de su dirigencia entró en fase de animadversión con los criterios y pensamientos de Don Juan, dando origen al Partido de la Liberación Dominicana.

Este último, un Partido de cuadros, ideológico, que empezando de cero con un puñado de jóvenes con los mismos sueños e ideales iniciaron el forjamiento de un ¨ Nuevo Camino¨.

A través de estas manifestaciones políticas, Don Juan expresaba no solo su insatisfacción con los regímenes existentes en su época, sino que demostraba su capacidad de construir a partir de sus ideales y pensamientos cosas que hoy se le pueden considerar auténticos legados históricos para beneficio de la sociedad nacional.

Don Juan cerró su página de vida sobre la tierra unificando mediante un sello imborrable a su Partido de la Liberación Dominicana con el partido que adversó rabiosamente durante casi toda su existencia, propiciando el advenimiento de una nueva generación de gobernantes. Ello también es parte de su legado político como lo fue igual de relevante su participación en la instauración del nuevo sistema democrático que disfrutamos los dominicanos como característica de los ´nuevos tiempos´ .

Las acciones de Don Juan en la postrimería de su vida dieron lugar al surgimiento de Leonel Fernández, me refiero al Leonel Presidente que en nombre de su partido ha iniciado un proceso de construcción de un nuevo manojo de legados.

La visión de Don Juan finalmente se puso a prueba al considerar que ese joven pudiera encarnar sus aspiraciones al considerarlo metafóricamente ¨una mina de oro.¨

El Dr. Leonel Fernández no es un político improvisado, ni tampoco formado de la noche a la mañana. Siendo un jovenzuelo demostraba gran capacidad de asimilación y aprendizaje. Su dedicación a los estudios con ojo crítico y en cuanto a sus preocupaciones en los asuntos e inquietudes en materia política desde siempre en Villa Juana nadie puede cuestionar ni dudar.

Al respecto, me permito hacer brevemente una anécdota que viví, no me la contaron, aunque yo lo hiciera 23 años después al mismo Presidente Fernández, recién ocupaba el palacio nacional por primera vez.

Resulta que estando tres mozalbetes que impartíamos docencia en materias sociales en el Colegio Cristóbal Colón, donde nos formamos, parados en la calle Manuel Ubaldo Gómez esquina Tejada Florentino, el poeta Domingo de los Santos, Leonel Fernández y yo, compartíamos con el Profesor Otilio Mercedes y Sandoval, a quien todos respetábamos y admirábamos de una manera muy especial.

Danilo no debe dejar influenciarse ni por el triunfalismo, ni la petulancia ni el rencor

Aquella mañana, luego de Leonel despedirse se alejaba hacia la Avenida San Martin con su acostumbrado cargamento de libros bajo un brazo mientras que con el otro sostenía una chaqueta oscura. Los volúmenes en esos días eran Trujillo, Causas de una Dictadura sin Ejemplo, de Cristóbal Colón a Fidel Casto, Dictadura con Respaldo Popular y Cien Años de Soledad. Otilio exclamó con su voz particular como para que todos lo oyéramos -¡Ese muchacho va a ser Presidente de la República!-. A la sazón, ya se manifestaban los disgustos de Don Juan en el PRD y se gestaba la formación del PLD. Nadie sintió dudas de lo expresado allí.

Más de veinte años después, se cumplió el presagio. Fallecieron Dominguito y Otilio a destiempo.

Ya no siendo el Leonel aquel que influía en el comportamiento de muchos jóvenes de su generación, sino como Presidente de la República, ha venido demostrando ser un estratega político, de fina visión, con capacidad también de construir un legado desde su Partido de la Liberación Dominicana, que desde ya, queda plasmado en las páginas de la historia latinoamericana y que en su momento se juzgará sin pasión ni enfado.

Leonel ha sido el producto de un proceso en el que se conjugan factores que definen el liderazgo de las tres figuras más influyentes en la vida política de los últimos cuarenta años de democracia nacional. Su participación la entendemos como vital para el mantenimiento y fortalecimiento de ese proceso democrático. Esto último ya es parte de su legado.

Actualmente, el Partido de la Liberación Dominicana, convertido en una fuerza política democrática y progresista, está inmerso en los quehaceres de elecciones internas para la escogencia del candidato que insistirá en preservar el poder político en el 2012.

El Dr. Leonel Fernández se consagra hoy día como el máximo líder, orientador y guía del PLD luego de la desaparición del Profesor Juan Bosch, cuyas condiciones no están en juego de ninguno de los dos. Se entiende, que aún entregando la antorcha de la dirección del Estado, la estructura y la incidencia en las decisiones del Presidente Fernández en el desenvolvimiento de la vida nacional, él gravitará de manera determinante por muchos años, por encima de las perversidades y las mezquindades que se susciten.

Vemos ahora la gran posibilidad de relevarlo en el Palacio Nacional a Danilo Medina, mas no en su posición de líder. Danilo, quien tendrá que emplearse a fondo en este nuevo proceso, después de concluida la lucha interna para su selección como Candidato Oficial en el 2012 y en el que tendrá que enfrentarse con quien lo derrotara en el año 2000.

El Licenciado Danilo Medina goza de una virtud que pocos de los líderes del PLD han concitado, su capacidad de mantener aglutinado a sus seguidores ante la persistencia en sus aspiraciones presidenciales. Si Danilo Medina logra constituirse en un ente unificador hacia lo interno de su partido, hacia fuera echara una gran batalla por alcanzar la Primera Magistratura de la Nación para dirigir sus destinos hasta el 2016.

En definitiva cuenta, se trata de la continuidad del Partido de la Liberación Dominicana por erigir un Proyecto de Nación para que también continué el progreso, sueños, ideales y aspiraciones de quienes constituyen este partido en el poder y una gran mayoría del pueblo dominicano.

Si bien el Profesor Juan Bosch tiene como legado al Partido de la Liberación Dominicana, no menos cierto que debe considerarse a Leonel Fernández un Legado del PLD junto con una nueva generación de líderes.

Los días por venir serán decisivos y Danilo no debe dejar influenciarse ni por el triunfalismo, ni la petulancia ni el rencor.


Sobre esta noticia

Autor:
Mario Holguin Alvarez (114 noticias)
Visitas:
1562
Tipo:
Opinión
Licencia:
Distribución gratuita
¿Problemas con esta noticia?
×
Denunciar esta noticia por

Denunciar

Comentarios

Aún no hay comentarios en esta noticia.