Las autoridades vaticanas ordenaron la puesta en libertad este sábado de la activista de Femen detenida tras intentar robar la estatua del Niño Jesús el jueves de la Plaza de San Pedro.

El día de Navidad, la ucraniana Iana Aleksandrovna Azhdanova corrió con el pecho desnudo hasta el pesebre situado en medio de la plaza, llena de gente, con el lema "God is a woman" ("Dios es una mujer") sobre sus senos y trató de sustraer la estatua del niño. La activista fue arrestada y puesta bajo custodia, enfrentándose a un juicio por "ultraje, actos obscenos en un lugar público y robo".

Pero, las autoridades judiciales del Estado papal han optado finalmente por prohibir su entrada en El Vaticano y en cualquier otra propiedad de la Iglesia, informó Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede.

Lombardi había asegurado el viernes que El Vaticano se tomaba "con extrema seriedad la protesta de Femen, dada su configuración y circunstancias, que ofenden intencionalmente el sentimiento religioso de mucha gente".

Mientras que Azhdanova ha sido liberada, el empresario italiano Marcello di Finizio, que fue arrestado el viernes por escalar la fachada de San Pedro, continuaba detenido este sábado, pendiente de ser interrogado por un juez. Di Finizio protestaba contra una nueva directiva europea que impone a Italia la subasta de las concesiones de playa a partir de 2015, una ley que amenazaría la supervivencia de su balneario cerca de Trieste, en la costa noreste italiana.