Al menos 33 personas murieron este domingo en varios atentados reivindicados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) perpetrados cerca de un mercado en un barrio de mayoría chií de Bagdad, según responsables médicos y de seguridad iraquíes.

Los ataques perpetrados en la zona de Sadr City, en el norte de Bagdad, cerca de un mercado, también provocaron al menos 79 heridos. Según las mismas fuentes, al menos uno de estos ataques fue obra de un kamikaze.

Por la mañana, otro ataque del EI contra un puesto del Ejército en Abu Ghraib, al oeste de Bagdad, mató a ocho militares. Los yihadistas mantuvieron el control del lugar durante horas hasta que fueron desalojados. Hubo también 22 heridos.

El EI ?que controla vastos territorios en el país, al oeste y al norte de Bagdad, tras una fulgurante ofensiva lanzada en 2014? reivindicó estos atentados en un comunicado difundido en internet, mencionando que dos kamikazes hicieron estallar sus chalecos explosivos en Sadr City.

Los atentados suicidas habitualmente indican que sus autores son grupos extremistas suníes, ya que este método es utilizado habitualmente por organizaciones yihadistas como el Estado Islámico.

El grupo considera como herejes a los chiíes, la comunidad mayoritaria en Irak. El jueves, un ataque contra civiles chiíes dejó nueve muertos.

Desde que el grupo lanzó su campaña militar, la violencia en las ciudades ha disminuido, ya que muchos de sus combatientes fueron desplegados en el "Califato" que la organización proclamó entre Irak y Siria.