Eulalia Parra tiene un okupa en la parte inferior de su vivienda. Jamás se ha identificado, solo la saluda y no muestra interés en ayudar con los pagos.

El hombre aprovechó el fallecimiento de un inquilino moroso para quedarse dentro de la vivienda. Se niega a marcharse de la vivienda hasta que se lo diga su abogado.

Eulalia Parra no puede cortar los suministros hasta que un juez lo autorice. Por lo tanto, mes a mes tiene que pagar los gastos del hombre que vive de okupa en su casa.

Esta mujer los cifra entre 500 y 600 euros, por lo que está dejando de ingresar por el alquiler y por los gastos que le genera de luz, agua y gas.

Eulalia ha hecho una performance sobre lo ocurrido para así llamar la atención sobre su caso y que le den alguna solución.

Por la vía penal tiene ya juicio a mediados de enero, pero por vía civil, que es el que puede ordenar el desahucio, aún está esperando.