Hoy quiero contarles algo que en los últimos días ?me ha tenido algo preocupada como mamá. Como todas ustedes que siempre andan muy pendientes de sus hijos, también yo ando con los ojos bien abiertos en todo lo que tenga que ver con mi hijo y como muchas ya saben porque lo he contado por aquí,   mi hijo  es un niño super cariñoso, amable, sensible y en el jardín de infancia casi nunca he recibido quejas de él.

Si bien es cierto  los niños del aula de mi hijo no son violentos, algunos son muy toscos para jugar. Entiendo que como hombrecitos tienen un modo más brusco si obviamente los comparamos con las niñas, sin embargo no todos los niños son iguales. Para ir al grano y no cansar tanto con los rodeos. Mi hijo no tiene esta forma de ser, le encanta jugar con otros niños pero no sabe defenderse ante los empujones, manotazos, juegos bruscos de algunos de sus compañeros.

Si lo digo es porque obviamente lo he visto con mis propios ojos y porsupuesto no me gusta que no sepa como defenderse. A mi modo de ver defenderse no es lo mismo que pegar o ser agresivos. Le enseñamos a nuestro hijo con el ejemplo a no ser violentos, ni a vengarnos, devolver mal por mal va en contra de los principios que le enseñamos. Sin embargo ¿deberian dejarse empujar o agredir  sin protestar?.

Los niños a esta edad viven en constante luchas de rivalidad, algo completamente normal pues quieren demostrar a los demás lo fuertes que son, su poder, su control y las luchas, peleas o empujones son un medio de demostrarlo pues aún no tienen la madurez necesaria para resolver sus diferencias de otra forma.

Pero una como mamá se preocupa de que esto no sea pasajero y que toda la vida haya alguien que lo trate mal y no sepa como defenderse ante los abusones. No estaremos con ellos las 24 horas del día así que a mi modo de ver tengo que enseñarle a defenderse. Si Jesús dijo "al que te dé una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.", no quiso decir que si alguien te da un puñetazo en un lado de la cara, debes dejar que te dé en el otro lado, no eso no significa. Sin duda hablaba de no devolver mal por mal, pero no de permitir que sigan abusando de nosotros.

Le hemos enseñado a Kevin que cuando alguien lo empuje obviamente para provocarlo -no hablamos de las situaciones que se dan sin querer o por accidente- que sea enérgico y que le diga con voz  fuerte  "No me empujes",   "No me pegues" o "No me toques". Esta es una estrategia diferente e incluso más eficaz pues lo que logramos es enseñarles a sacar el caracter que tienen por dentro mientras que a la vez le decimos que defenderse con golpes es caer  hasta la altura del niño agresor.  Si le decimos al niño  "tu también pegale"  no lograremos que  sea  mejor  que el  que empezó la pelea.

Esto no es nada fácil algunos niños son muy nobles, pero en el caso de mi hijo  estamos practicando en casa con algunas sesiones en las que dramatizamos una clara incitación a la pelea o hasta un insulto, algo que tampoco ellos deben permitir.

Nuestra tarea es ayudarle a que saque "el genio" que lleva por dentro pero bien encauzado u orientado porsupuesto y que aprenda a hacerse respetar sin llegar a la agresión.  Además no olvido de decir que también le hemos dicho que ante una situación difícil salga de la escena y que eso no es señal de debilidad, este es un buen consejo para niños y grandes cuando  nos alejamos de una situación difícil o un problema feo, no  demostramos debilidad. Muestra que a favor de lo que es correcto tú eres el fuerte.

En conclusión para mi defenderse no es igual a agredir, la defensa verbal, el huir de la escena o cualquier otra alternátiva opuesta a la violencia es válida para hacernos respetar.