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El Polisario: Treinta años abusando de los derechos de los Saharauis (II Parte)

24/08/2010 11:50 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

SOLDADOS DEL FRENTE POLISARIO PARTICIPARON EN EL SECUESTRO DE LOS COOPERANTES ESPAÑOLES JUNTO A AL QAEDA EN EL MAGREB ISLÁMICO, mientras piden la solidaridad de España y del resto del mundo

Chema Gil. Periodista. Diplomado UNESCO en estudios sobre Terrorismo. Subdirector de www.gacetaforense.es

Fateh Ahmed Ould Mohamed Fadel evocó también los intereses comunes que unen el polisario a Al Qaeda, prueba de ello la ausencia de la mínima confrontación entre ambas partes y el tráfico de armas al cual se dedican los dirigentes del polisario que los vuelven a vender a los miembros de Al Qaeda.

“Cómo pudo Al Qaeda tener acceso a los territorios mauritano y argelino y secuestrar europeos, sin cometer semejantes actos en la región de Tinduf donde vienen varios europeos y se pasean sin control”, se preguntó.

El ex dirigente del “polisario” llamó a la comunidad internacional y las organizaciones de los derechos humanos a desvelar la realidad prevaleciente en Tinduf y enjuiciar los autores de los crímenes odiosos perpetrados en estos campos.

Aunque parezca una reiteración conviene recordar lo ya dicho anteriormente, Fateh Ahmed Ould Mohamed Fadel Ould Ali Salem, nació en 1954 en las cercanías de Amara, se incorporó al “polisario” en 1975, en su ala militar antes de ser enviado a la base "Al Janine Bourzek" en Argelia donde recibió sus primeros entrenamientos.

Después volvió a Tinduf donde había recibido nuevos entrenamientos militares en el campo “N’Khila”. Más tarde, ha sido encargado de la intendencia antes de ser nombrado en la pretendida “dirección de la seguridad”, y después director de la seguridad pública de la “media luna roja saharaui”.

Fadel Ould Ali Salem fue nombrado también “jefe de seguridad de la tercera zona militar”, puesto militar que había ocupado hasta su retorno a Marruecos.

Este es, seguramente, uno de los aspectos más importantes de los que pretendo analizar en esta obra pero será más adelante. Creo que es prioritario ayudar a ‘desmontar’ una imagen falaz construida a base de pedir solidaridad y emplear lo obtenido, gracias a las buenas intenciones de las personas, en fines bien distintos a la ayuda a niños, mujeres y mayores, pues buena parte de esta ayuda se destina, según los propios saharauis, a una especie de bolsa de favores o de red de contrabando montado con determinados elementos de Argelia en zonas como Malí.

Un Frente Polisario en declive y sus relaciones con Al Qaeda

El conflicto del Reino de Marruecos con el menguado y cada vez menos creíble Frente Polisario, debe ser abordado, sin pérdida de tiempo, por los actores internacionales que se han vinculado a la solución del conflicto de alguna manera, y han de hacerlo con una cierta mirada fría.

España y Francia debieran ser las primeras potencias en poner de manifiesto una posición clara, rotunda y definitiva sobre la cuestión y que, desde nuestro punto de vista, pasa por la aceptación del Plan de Autonomía que propone el Reino de Marruecos. Un plan que los analistas internacionales ven como la mejor salida a la situación, máxime cuando el Polisario, en los campamentos de Tindouf, está sufriendo una auténtica sangría de saharauis que regresan a Marruecos, pese a que tienen que enfrentarse a ciertos elementos y grupos internos de la RASD que los someten a persecución y vejaciones.

Lo cierto es que hasta fundadores del Polisario ya han advertido que su causa pasa por normalizar las relaciones con Marruecos, integrarse en su Estado y asumir las cotas de autogobierno que el estado marroquí está dispuesto a ceder mediante el bien valorado, a nivel internacional, y ya citado aquí, Plan de Autonomía.

Una posición clara al respecto no es adoptada por los gobiernos españoles (PP y PSOE) por un rancio sentimiento de pertenencia a aquellos saharauis del año 75 que quedaron a su suerte después de que España abandonara la zona. La mala conciencia y una nostalgia rancia y obsoleta promueve que colectivos sociales, no excesivamente numerosos, estén prestos a plantear movilizaciones en contra de cualquier apoyo español a Marruecos en el conflicto saharaui, pero tales posiciones ideológicas no están fundamentadas desde el conocimiento de la realidad que hoy tenemos el deber de observar en la región, en todo el Sahel y más concretamente en la zona que pretenden los saharauis.

Después de treinta años del citado conflicto, el conocimiento general que la sociedad española tiene sobre el área del Sahara Occidental, prácticamente está limitado a lo que se conoce de las actividades de los amigos del Pueblo Saharaui; a las loables actividades que diferentes ONGs y grupos de artistas realizan para la promoción de la calidad de vida y la cultura, especialmente en la zona de los campamentos de refugiados…¿pero la cuestión del Sahara, hoy, podemos verla desde la perspectiva de lo ocurrido hace treinta años? Es evidente que no; si lo hiciéramos estaríamos incurriendo en una grave irresponsabilidad.

Mediadores internacionales, y hasta enviados de Naciones Unidas están haciendo un llamamiento a observar la realidad-real sobre la cuestión del Sahara Occidental, máxime después de la disposición del Reino de Marruecos por el establecimiento de un estatuto de autonomía de la región – homologable a los modelos españoles- y del que hablaremos al final de forma y en términos que sean comprensibles.

Despreciar –desde posiciones obsoletas y alejadas de la realidad actual- una iniciativa así aboca a una extensión temporal de un conflicto en el que ni tan siquiera el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas estaría dispuesto a intervenir. La reconciliación de posturas pasa por el plan de autonomía, ya lo han dicho incluso hasta fundadores del propio Frente Polisario.

Geoestratégicamente es de un desconocimiento irresponsable seguir manteniendo posturas cerradas entorno a este conflicto.

El Sahara –olvidemos por un momento límites geográficos que en realidad existen más en el imaginario que sobre el terreno- es una zona especialmente conflictiva y potencialmente peligrosa, para los países de la zona y para Europa.

No podemos abocar a una zona como el Sahara Occidental a convertirse en un estado fallido que es lo que ocurriría en muy poco tiempo en caso de producirse la autodeterminación; ésta abriría las puertas de una región, difícilmente controlable, a manifestaciones terroristas y/o delictivas de carácter internacional como el tráfico de armas o el de drogas a gran escala, algo que ya se está dando. Sólo el Plan de Autonomía aporta seguridad en cuanto al desarrollo económico y social de sus habitantes; así como para alcanzar un nivel de autogobierno y a la seguridad de que la zona no se convierta en poco tiempo en un estado fallido, en una zona tan absolutamente sensible para países como Argelia, Marruecos y España y por ende Europa.

Amplias áreas del Sáhara y el Sahel son el territorio operativo de grupos islamistas armados como el desesperado y empobrecido Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), grupo del que es razonable sospechar dos cuestiones, que recibe una inyección económica desde Libia y de otros países más lejanos y que de sentirse apoyado dará el salto –antes o después- para cometer atentados y para ello el futuro teatro de operaciones que manejan con más facilidad es España; El AQMI es descrito por diferentes analistas como un movimiento desesperado y empobrecido sí, pero potencialmente más peligroso. El lector se preguntará qué tiene que ver el conflicto del Sahara con todo esto; les invito a que acudan a Internet y observen los movimientos y acciones a lo largo y ancho del Sahel de ciertos grupos islamistas inspirados por Al Qaeda. Es el Sahara, todo el Sahara, lo que emplearán para establecer su ‘batalla’ para someter la zona (el Magreb) con la ilusoria y descerebrada idea de recuperar ‘Al Andalus’, entre otros objetivos, antes de lograr su ansiado ‘califato global’.

Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) es un grupo que aun con dificultades econónicas no ha dudado en desplegar una extraordinaria violencia en sus atentados. Pese al despliegue de operativos militares de élite, con unidades especializadas norteamericanas, éstas apenas logran controlar algunos movimientos; ni evitar que muchos hayan abandonado AQMI, sin ser detenidos y hayan viajado a escenarios como Afganistán, Irak o Pakistán; tampoco han evitado que se hayan sumado a la franquicia terrorista elementos procedentes de Argelia, Libia, el propio Frente Polisario y Marruecos. De este último país han dado el salto a la Yihad más violenta, radicales islamistas procedentes de grupos como el Tabligh y Justicia y Espiritualidad, así como de variantes radicalizadas de este movimiento liderado por el viejo Abdessalam Yassine, siguiendo consignas internas del movimiento radical; elementos, éstos, cuya ideología, de fondo, está atravesada por una etiología común, la de los Hermanos Musulmanes, presente de forma más o menos disfrazada en comunidades islámicas en España, muchas de ellas vinculadas a la UCIDE que preside el sirio Riay Tatary, que en los últimos tiempos está realizando extrañas maniobras con los más radicales islamistas españoles que han intentado hacerse con la Federación de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI), o sus maniobras para relacionarse con lo más radical de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde el islamismo radical está realizando un juego harto peligroso y que de triunfar supondrá mayores problemas entre Marruecos y España, y si no tiempo al tiempo.

Siguiendo al experto Javier Jordán, en su exposición sobre los procesos que han debilitado a Al Qaeda en el Magreb Islámico, “hacen temer –decía- una revitalización del grupo”, es decir, su posible relanzamiento y no podemos perder de vista la violencia y las técnicas de este grupo.

Se trata de de una organización terrorista que utiliza, entre sus imagotipos, algunos que citan el término Al Andalus de una forma que no deja lugar a dudas sobre sus intenciones amenazadoras contra nuestro país. Basta ver algunos de sus vídeos para comprobarlo.

Ya sé que ahora lo fácil es ubicar esta personal opinión de la vinculación del Frente Polisario a Al Qaeda en el Magreb como un apoyo a las tesis Marroquíes; cuando en realidad me estoy haciendo eco de las opiniones manifestadas por los analistas de Naciones Unidas y de otros mediadores que ven en el Plan de Autonomía propuesto por el Reino de Marruecos como el mejor y más serio paso para normalizar el conflicto y garantizar la seguridad. No obstante, y como no podría ser de otra manera, acepto la crítica. Aunque me gustaría conocer el pragmatismo y la realidad de otras propuestas; siempre que las mismas hablen de realidades y conocimiento de lo que en el Sahara se está cociendo, dentro y fuera de los campamentos de Tinduf.

El European Strategic intelligence Security Center, conocido por su acróstico ESISC ha informado desde Bruselas de los riesgos más que potenciales de la unión de intereses entre el AQMI (Al Qaeda en el Magreb Islámico) y el Frente Polisario y lo hace sin tapujos:

Los vínculos entre la descomposición del Frente Polisario y el desarrollo del terrorismo en la zona del Sahel son cada vez más estrechos y el hundimiento del movimiento saharaui alimenta la actividad de la organización "Al Qaeda en el Magreb islámico" (AQMI).

"Si esta hipótesis reflejaba al principio el simple miedo de una deriva del Polisario, se ha convertido cada día en algo más concreto, hasta el punto de ser objeto de un consenso para los analistas de la situación securitaria en la región”, destaca el ESISC en el informe titulado “El frente polisario y el desarrollo del terrorismo en el Sahel”.

SIGUIENTE ENTREGA: SAHARAUIS VENDIDOS COMO ESCLAVOS EN TINDOUF SIN QUE EL POLISARIO Y ARGELIA MUEVAN UN DEDO

“Uno de los elementos mayores que motivaría a los miembros del Polisario de incorporarse a los rangos de AQMI u otras organizaciones islamistas armadas sería el hecho de que estos grupos intentan de que el Reino de Marruecos sea su blanco, el mismo país que la propaganda separatista les enseñó a odiarlo desde su infancia”, escribe el ESISC.

El informe ilustra mediante ejemplos y estudios, la diversidad de los vínculos que existen entre el polisario y AQMI, demostrando que “unos miembros activos del movimiento en busca de ingresos complementarios, igual que todos los mercenarios que buscan rentabilizar su pasada experiencia en las estructuras militares del movimiento independentista saharaui, pueden caer en el terrorismo después de haber pasado probablemente por distintas formas de tráfico”.

“La criminalidad, y, en particular, los tráficos de drogas y armas que se han desarrollado en la región desde hace ya unos años, les ha parecido a varios saharauis como la única perspectiva de un futuro viable, ante la frustración creada por la falta de perspectivas políticas ofrecidas hoy por la dirección del Frente Polisario”, indica el ESISC.

“La diversidad de las vías que llevan a esta deriva terrorista es una enésima prueba del nivel avanzado de la descomposición del Frente Polisario más de treinta y cinco años después de su Creación”, indica el documento.

También ilustra la complejidad de los retos de seguridad de la región donde es cada vez más difícil distinguir entre terroristas y traficantes de todo tipo.

El Frente Polisario y el secuestro de los cooperantes españoles

No parece que el informe del ESISC ande muy desencaminado veamos que decía un despacho de la agencia EFE sobre los presuntos autores del secuestro de los tres cooperantes españoles en Mauritania:

El presunto autor del secuestro de los cooperantes españoles en Mauritania, Omar Saharaui, se declaró "no culpable", al igual que otros cinco supuestos implicados, en el comienzo del juicio que se abrió hoy en Nuakchot por este caso.

Omar Uld Sid'Ahmed, alias 'Omar al Saharaui'

Saharaui, cuyo verdadero nombre es Omar Uld Sid'Ahmed Uld Hame, está siendo juzgado por la Sala Penal del Tribunal de Nuakchot junto a otras diez personas, de la cuales cinco están procesadas en rebeldía.

Ante una gran expectación mediática y con presencia de varios diplomáticos europeos en la sala, el tribunal abrió la sesión extraordinaria con las declaraciones de los imputados, que coincidieron en negar los cargos y declararse "no culpables".

Saharaui señaló en su intervención que no tiene nada que ver con el secuestro, y que únicamente se dedica a trabajar como comerciante ambulante a través de las fronteras entre Mauritania, Mali y el territorio saharaui.

En el banquillo de los acusados se sienta también Mohamed Salem Uld Ahmuda Uld Mohamed, quien según su propia confesión es militar del Frente Polisario, y a quien la Fiscalía acusa de haber guiado a los captores a través de territorio saharaui en su huida con los secuestrados hacia Mali.

Según Uld Mohamed, las fuerzas de seguridad mauritanas lo detuvieron en territorio saharaui bajo control del Polisario.

Dos de los juzgados en rebeldía reconocieron ser también miembros del Frente Polisario cuando fueron arrestados junto a Uld Mohamed, aunque posteriormente las autoridades mauritanas los pusieron a disposición de los saharauis tras su detención.

Este es Moctar Belmoctar, uno de los líderes en rebeldía

Entre los procesados en rebeldía se encuentra el argelino Moctar Belmoctar, conocido también como Jaled Abulabas y Moctar Belauar, supuesto dirigente de la rama de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) que mantiene secuestrados a Albert Vilalta y Roque Pascual.

Ambos cooperantes de la ONG Barcelona Acció Solidaria fueron raptados a 150 kilómetros de Nuakchot, cuando viajaban en una caravana humanitaria. Junto a ellos también fue secuestrada Alicia Gámez, quien fue liberada el pasado 10 de marzo por sus captores”. Todos ellos por fin liberados tras nueve meses de secuestro y tras un delicadísimo trabajo combinado de inteligencia y diplomacia. No nos conformemos con la noticia de alcance, aunque muy clarificadora y coherente con lo que denunciaba antes el exdirigente del Polisario y el propio informe del ESiSC. La ONG Africa-Fundación Sur emitía una información en la que denunciaban que militares del Frente Polisario habían ayudado a Al Qaeda en el Magreb Islámico a realizar el secuestro de los cooperantes españoles y, además, a huir a los secuestradores con sus víctimas hasta la frontera de Malí. Esta es la crónica que apareció publicada el 12 de abril de 2010 en Le Potentiel en la República Democrática del Congo, firmada por Freddy Mulumba Kabuayi:

Después de largas semanas de espera, por fin se hizo la luz sobre las circunstancias de los sucesos ocurridos en la frecuentada ruta que une Nuadibú y Nuakchot, en Mauritania, el pasado 29 de noviembre de 2009, en los que fueron secuestrados tres cooperantes españoles, miembros de una ONG catalana, cuando transportaban ayuda a las poblaciones más desfavorecidas de algunas partes subsaharianas, así como sobre el asunto del secuestro de la pareja de italianos, el 18 de diciembre, en la región de Kobeni, a más de 700 kilómetros de la capital mauritana, Nuakchot. En efecto, después de haberse confirmado por parte de la ministra mauritana de Asuntos Exteriores, Naha Ould Mouknass, que “todas las personas” que participaron en los secuestros en Mauritania, en diciembre, de una pareja de italianos, habían sido arrestadas, Nuakchot acaba de anunciar que el principal autor de los hechos, por parte de Al Qaeda del Magreb Islámico, Aqmi, de tres españoles ha sido inculpado y encarcelado en compañía de cinco de sus seguidores, sin hablar de otros dos que han sido puestos bajo vigilancia judicial. En este mismo sentido, las autoridades mauritanas anunciaron el día 29 de marzo que 20 personas habían sido inculpadas y encarceladas por su supuesta pertenencia a un grupo de traficantes vinculados a Al Qaeda en el Magreb Islámico. Estos últimos acontecimientos ilustran la determinación del nuevo equipo de dirigentes mauritanos para acabar con la utilización de su territorio por los grupos criminales y terroristas. Alarmados por la proliferación de todas las formas de tráfico en su país y por los movimientos de grupos terroristas vinculados al brazo de Al Qaeda en el norte de África, los servicios de seguridad mauritanos se han desplegado, gradualmente, sus investigaciones para llevar ante la justicia a los responsables de los secuestros de los europeos. La investigación ha revelado que estos actos fueron obra de redes criminales que actúan en total impunidad en la extensa tierra de nadie, que representa el triángulo fronterizo entre Mauritania, Argelia y Mali. Peor aún, estos criminales no son otros que los traficantes que provienen de los campos del Frente Polisario en Tinduf, algunos de los cuales trabajan para las estructuras militares de este movimiento separatista con sede en el suroeste de Argelia. Por otra parte, las investigaciones han confirmado que el secuestro de los tres españoles, de los que dos todavía están en manos de Mokhtar Belmokhtar, emir de Al Qaeda en el Sahel, no se habría podido efectuar sin la contribución del llamado Omar Ould Sid Ahmed Ould Hamma, alias Omar Saharaui, miembro del Frente Polisario que acaba de ser reconocido por la justicia mauritana como el principal autor del rapto en cuestión y encarcelado en la prisión central de Nuakchot.

Según las fuentes de seguridad mauritanas, además del arresto de este individuo directamente relacionado con Mokhtar Belmokhtar, las autoridades mauritanas han inculpado a más de una veintena de personas por el mismo asunto, entre las cuales se han podido identificar a algunos “militares” en ejercicio en el seno del Frente Polisario. Entre ellos estaría Mohamed Salem Mohamed Ali Ould Rguibi, de unos 50 años, que ejerce en la cuarta región militar del Polisario, Mohamed Salem Hamoud, de unos 20 años, que ejerce en la misma región, así como Nafii Ould Mohamed M’Barek, de unos 50 años, que había ejercido en la séptima región militar del Polisario, antes de meterse en el contrabando y el tráfico entre Zouerate y Atar, al norte de Mauritania.

Más allá de todas estas consideraciones, queda claro que los resultados de las investigaciones de las autoridades mauritanas han puesto de relieve el alcance de las conexiones desarrolladas por los emires sahelianos de Aqmi, en las filas de los grupos criminales que están activos en los estados de la región, donde han recibido la orden de “subcontratar” las actividades terroristas de la rama magrebí de Al Qaeda y de secuestrar a los trabajadores humanitarios occidentales, para revenderlos a las estructuras de esta organización, que tienen sede en el vasto norte de Mali.

Este asunto constituye la enésima prueba que demuestra la manera en la que Aqmi se beneficia de la persistencia de los conflictos separatistas en la región, como el conflicto del Sáhara con Marruecos, para comprar los servicios de ciertos separatistas, fácilmente orientados a facilitar las actividades terroristas, dada la incapacidad de sus dirigentes del Polisario de ofrecer perspectivas políticas tranquilizadoras para su futuro”. Otro despacho de la Agencia EFE que no tiene desperdicio, el reconocimiento de los polisarios secuestradores y lo que cobraron La Fiscalía mauritana ha pedido cadena perpetua con trabajos forzados para el principal imputado por el secuestro de tres cooperantes catalanes en Mauritania, Omar Saharaui, y para tres de sus presuntos colaboradores. El Ministerio Público ha reclamado penas de tres y dos años de prisión firme para otros dos implicados en el caso. Por su parte, el presidente de la Sala Penal del Tribunal de Nuakchot ha decidido suspender el juicio contra otros cinco procesados en rebeldía -entre quienes se encuentra Moctar Belmoctar, presunto jefe de la rama de Al Qaeda Islámico (AQMI) que mantiene secuestrada a Albert Vilalta y Roque Pascual- hasta que sean arrestados.

El fiscal ha pedido la cadena perpetua para Omar Uld Sid'Ahmed Uld Hame, verdadero nombre de Omar Saharaui, al considerarlo el organizador material del secuestro el pasado 29 de noviembre de Vilalta, Pascual y Alicia Gámez -liberada en marzo- en la carretera entre Nuakchot y Nuadibú. Según la acusación, Saharaui reconoció haber recibido 10 millones de francos CFA (unos 15.000 euros) de Belmoctar por ejecutar el secuestro, una parte antes y otra después de haberlo llevado a cabo. La Fiscalía demandó la misma pena para Mohamed Salem Uld Ahmuda Uld Mohamed, militar del Frente Polisario, a quien acusa de haber guiado a los captores en su huida a través de territorio saharaui hacia Mali.

Igualmente, la Fiscalía reclama la cadena perpetua para los colaboradores Bujari Uld Isaui y Elid Uld Lehbus, quien no intervino en el secuestro directamente, ya que, pese a haber sido reclutado por Saharaui para viajar desde Argelia a Mauritania para participar en él, cayó enfermo y no pudo hacerlo. Mientras, se pidieron tres años de prisión firme y una multa de 200.000 uguiyas (550 euros) para la hija de Uld Isaui por haber alertado a Saharaui después de que su padre fuese detenido, lo que permitió su huida a Mali, y dos años y 500.000 uguiyas (1.380 euros) contra otro acusado por haber aprovisionado a los secuestradores.

El presunto autor del secuestro de los cooperantes españoles en Mauritania, Omar Saharaui, se declaró "no culpable", al igual que otros cinco supuestos implicados, en el comienzo del juicio que se abrió hoy en Nuakchot por este caso. Saharaui, cuyo verdadero nombre es Omar Uld Sid'Ahmed Uld Hame, está siendo juzgado por la Sala Penal del Tribunal de Nuakchot junto a otras diez personas, de la cuales cinco están procesadas en rebeldía.

Ante una gran expectación mediática y con presencia de varios diplomáticos europeos en la sala, el tribunal abrió la sesión extraordinaria con las declaraciones de los imputados, que coincidieron en negar los cargos y declararse "no culpables". Saharaui señaló en su intervención que no tiene nada que ver con el secuestro, y que únicamente se dedica a trabajar como comerciante ambulante a través de las fronteras entre Mauritania, Mali y el territorio saharaui.

En el banquillo de los acusados se sienta también Mohamed Salem Uld Ahmuda Uld Mohamed, quien según su propia confesión es militar del Frente Polisario, y a quien la Fiscalía acusa de haber guiado a los captores a través de territorio saharaui en su huida con los secuestrados hacia Mali.

Las relaciones entre Al Qaeda, sus colaboradores y miembros del Frente Polisario han salido a la luz durante las investigaciones, pero España, calla

Entre los procesados en rebeldía se encuentra el argelino Moctar Belmoctar, conocido también como Jaled Abulabas y Moctar Belauar, supuesto dirigente de la rama de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) que mantiene secuestrados a Albert Vilalta y Roque Pascual. Ambos cooperantes de la ONG Barcelona Acció Solidaria fueron raptados a 150 kilómetros de Nuakchot, cuando viajaban en una caravana humanitaria. Junto a ellos también fue secuestrada Alicia Gámez quien fue liberada el pasado 10 de marzo por sus captores.


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Chema Gil (195 noticias)
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