Si bien el acceso al agua debe ser un derecho universal, hoy en día no todos tienen ese beneficio. Es por eso que muchas personas deben comprar agua embotellada para beber, la cual llega a representar un alto costo para la vida de las personas.

¿Por qué es tan cara el agua embotellada?

Si bien el agua podría parecer un recursos accesible, si comparamos el precio de las botellas de agua podemos ver que resulta ser un recurso un tanto caro. Esto debido a que son pocas las empresas que controlan su purificación y venta provocando que el precio sea excesivo por dicho control.

Conforme el agua se acabe el precio será cada vez más y más alto

¿Cómo ahorrar en agua embotellada?

Existen muchas formas de ahorrar en agua embotellada, las siguientes son las principales:

• Compra un depósito con filtro: En el mercado existen una gran cantidad de depósitos con filtros de purificación de agua. Su funcionamiento es simple, solo colocas el agua y esperas a que esta quede purificada, eso sí, puede llegar a tomar bastante tiempo purificar mucha agua.
• Coloca un sistema de purificación en la tubería: Otra opción es colocar un sistema de purificación de agua en tu tubería. Esto te asegurará un flujo constante de agua purificada en toda tu casa, eso sí, tendrás que invertir tus préstamos en línea confiables para poder costearlo.
• Usa dispensadores con filtros de purificación: Otra opción, común en gimnasios, por ejemplo, es el uso de dispensadores con sistemas de purificación de agua. Estos dispensadores te darán agua purificada, fría o caliente, al momento, aunque eso sí, por un costo inicial mayor que el de otros sistemas.
• Compra agua más barata: La última de las opciones es quizás la más fácil de todas pues básicamente se trata de cambiar de marca de agua purificada. Comprar tal vez una de marca más genérica o ir a que te rellenen el garrafón puede ser la solución.

Si bien la tendencia es que el agua se vuelva un recurso cada vez más preciado, existen formas en las que podemos aprovechar a este vital líquido sin gastar una fortuna.

Tendencias como la captación de agua de lluvia quizás puedan ser la solución tanto al alto costo del agua como a la escasez, cada vez más frecuente, de la misma.