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El término storytelling ha cobrado especial relevancia en el mundo de los negocios y el márketing en los últimos años. Frecuentemente escuchamos que para que nos compren un proyecto este debe de tener una buena historia detrás, un storytelling .
El término es una técnica de márketing que busca conectar a las personas con el mensaje que se quiere transmitir a través de una historia. En español se puede traducir como "contar historias". En suma, algo tan antiguo como el mundo.
"Incorporar el storytelling a la narrativa de negocios ayuda a conectar mejor con el interlocutor, cliente o inversor. Un buen storytelling está fundamentado en valores humanos, que son los que propician la empatía", explica Xósem Amero, experto en esta materia e instructor de Udemy. "La gente compra e invierte cuando cree en la persona y toma acciones a partir de las emociones que esta le genera", asegura.
La cuestión es que el storytelling no sólo le vale a una empresa; nos vale a todos. Nos ayuda a vender nuestro proyecto e, incluso, a vendernos a nosotros mismos; por ejemplo, frente a un reclutador en una entrevista de trabajo.
"Lo que hacemos en una entrevista de trabajo es hablar de nosotros mismos con la finalidad de generar sentimientos en el entrevistador y que, por supuesto, nos contrate", razona el instructor de esta plataforma de formación online . Para ello deberemos prestar especial atención a cinco aspectos fundamentales:
- Buscar puntos de conexión y empatía con el entrevistador. La empatía es nuevamente un factor primordial para afrontar con éxito una entrevista laboral. Ayudará a que el discurso fluya y la conversación con el entrevistador transcurra de manera natural
- Estar atento al interlocutor y evitar centrarnos en un monólogo. Es decir, darnos tiempo para percibir qué es lo que quiere la otra persona y así responder adecuadamente
- Llevar un discurso honesto. Las historias más personales son las más universales a la hora de conectar con otras personas
- Prestar atención a la emoción predominante que contagiamos con nuestra propia narrativa inconsciente y anticipar cuánto nos puede ayudar o restar en función de nuestros objetivos
- Estar preparado con recursos narrativos que nos puedan ayudar a salir de situaciones complicadas. Antes de quedarnos en silencio o no responder a la pregunta por desconocimiento, siempre es mejor reconducir la conversación hacia un terreno en el que nos sintamos cómodos
Como toda historia, nuestro relato debe contar con ciertas partes esenciales: una premisa (la idea que se va a demostrar), un tema en forma de valor humano (el gancho emocional), un héroe (en el que el público se vea reflejado y que muestre cómo es posible transformarse), un deseo o motivación y un conflicto (el obstáculo que deberá superar el héroe).
Pero, además, hay otros factores que nos pueden ayudar a vender, nuestro proyecto (tal vez nuestra startup ) o a nosotros mismos. Udey apunta estos cinco: