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Cuando empezaron las castañas preparé crema dulce de castañas y la envasé para realizar con ella alguna receta durante el resto del año. Podéis ver la receta Aquí. La primera ha sido esta tarta de queso que hoy os presento en el blog.
He mezclado dos tipos de queso porque, aunque con un queso fresco o uno cremoso tipo Philadelphia queda rica, pensé que el Mascarpone, al tener más sabor, le daría un punto de sabor más fuerte a la tarta. Así ha sido.
La crema de castañas, si no las hay en el mercado, podéis comprarla hecha en supermercados o tiendas gourmet. Puede ser también que, aunque encontréis las castañas, no os apetezca pelarlas ya que dan un poco de trabajo.
Con castañas cocidas de lata:
1 lata de castañas cocidas
La misma cantidad de azúcar integral
1/2 vaso de agua del caldo del bote
Con castañas naturales:
1/2 kg. de castañas ya peladas
1/2 kg. de azúcar integral
1/2 vaso de agua
Para la base:
140 gr. de galletas tipo digestive
80 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
Para el relleno:
200 gr. de queso tipo Philadelphia
250 gr. de queso Mascarpone
180 gr. de puré crema de castañas
3 huevos
100 gr. de azúcar
60 ml. de nata líquida para montar
Precalentamos el horno a 150º.
Ponemos en el vaso las galletas y trituramos 5 segundos, velocidad 10. Añadimos la mantequilla y mezclamos 5 segundos, velocidad 5. Cubrimos con esta preparación el fondo de un molde desmoldable de 22 o 24 cm. de diámetro aproximadamente, presionando con el dorso de una cuchara para que la base quede compacta. Metemos en el congelador mientras preparamos el relleno.
Lavamos el vaso y ponemos en el los quesos y el azúcar. Programamos en velocidad 2 para mezclarlo bien y vamos añadiendo los huevos de uno en uno hasta conseguir una mezcla homogénea. Añadimos la crema de castañas y seguimos mezclando hasta que esté todo bien integrado.
Sacamos el molde del congelador y, si no es de silicona, le untamos por las paredes de mantequilla. Vertemos la mezcla y metemos en el horno durante 75 minutos, aproximadamente. Esto depende un poco de cada horno.
Sacamos del horno y separamos la tarta de las paredes con la ayuda de un cuchillo con cuidado de no romperla. Dejamos enfriar y metemos en la nevera durante al menos 12 horas antes de consumirla.
Desmoldamos y decoramos como mas nos guste. Yo le he puesto marron glacé.
Tradicional:
Preparamos la crema de castañas. Receta Aquí. La dejamos enfriar.
Precalentamos el horno a 150º.
Trituramos las galletas. Añadimos la mantequilla y mezclamos bien. Cubrimos con esta preparación el fondo de un molde desmoldable de 22 o 24 cm. de diámetro aproximadamente, presionando con el dorso de una cuchara para que la base quede compacta. Metemos en el congelador mientras preparamos el relleno.
Ponemos en un bol los quesos y el azúcar. Mezclamos bien con unas varillas y vamos añadiendo los huevos de uno en uno hasta conseguir una mezcla homogénea. Añadimos la crema de castañas y seguimos mezclando hasta que esté todo bien integrado.
Sacamos el molde del congelador y, si no es de silicona, le untamos por las paredes de mantequilla. Vertemos la mezcla y metemos en el horno durante 75 minutos, aproximadamente. Esto depende un poco de cada horno.
Sacamos del horno y separamos la tarta de las paredes con la ayuda de un cuchillo con cuidado de no romperla. Dejamos enfriar y metemos en la nevera durante al menos 12 horas antes de consumirla.
Desmoldamos y decoramos como mas nos guste. Yo le he puesto marron glacé.
